lunes, 12 de septiembre de 2016

¡Pobre Ciudad Primada!

Créanme: Durante los doce años que viví en México nunca, como aquí, vi un camión recogiendo basura y entorpeciendo el tránsito sin ninguna consideración para nada ni nadie. Tampoco vi montones de basura en las aceras, ni a ningún hombre meándose en plena calle, ni que se plantaran en cualquier espacio público unos pobres padre de familia (enemigo de todo orden civilizado) a arrabalizar todo, ante la indiferencia de las autoridades llamadas a mantener el orden, el decoro urbano y la buena convivencia. (Con especial dedicatoria a David Collado, cuya gestión debe dignificar esta caótica y devaluada Primada).