jueves, 6 de octubre de 2016

Un millón de evacuados y 1.500 vuelos cancelados por el huracán Matthew en Estados Unidos


Los efectos del huracán Matthew, el más fuerte en el Caribe en casi una década, ya se sienten en la costa este de Estados Unidos antes de que toque tierra, lo que se espera ocurra en la tarde del jueves.


Zonas costeras de Florida, Georgia y Carolina del Norte y del Sur han iniciado los preparativos y evacuaciones —obligatorias en algunos condados, voluntarias en otros— que afectan a 1,5 millones de personas que residen en estas regiones. 


En estos estados se ha iniciado un éxodo masivo al interior: las autopistas se han atascado y muchas gasolineras y tiendas de comestibles se han quedado sin suministros, informa Reuters. 

Matthew ha provocado también la cancelación de 1.565 vuelos este jueves, según las estadísticas del portal FlightAware.



El huracán, que ha causado 39 muertos a su paso por Haití, Cuba y Bahamas, ha golpeado el centro de este último país este jueves por la mañana con vientos de hasta 185 kilómetros por hora, según el último boletín del Centro Nacional de Huracanes (CNH) de EEUU. Algunos aeropuertos de la isla han tenido que cerrar temporalmente, informa AFP. 

En el último parte del miércoles, el CNH pronosticó que en las próximas 24 a 36 horas Matthew se “reforzará”, con lo que para su llegada a Florida está previsto que el huracán recupere de nuevo la categoría 4 de un máximo de 5 en la escala Saffir-Simpson, es decir, con vientos de entre 210 y 249 kilómetros por hora.

“Todo el mundo en nuestro estado debe prepararse para un impacto directo”, ha dicho el gobernador de Florida, Rick Scott, que ha urgido a la población a prepararse porque la “destrucción podría ser catastrófica”. 

Los cuatro estados amenazados por el huracán han declarado el estado de emergencia, que permite a sus gobiernos movilizar a la Guardia Nacional, y han abierto refugios para la población. 

Scott ha pedido al presidente Obama que doble los efectivos activos de la Guardia Nacional, hasta los 3.000, y el envío de comida, agua y material impermeable a la zona antes del impacto del huracán.