viernes, 28 de julio de 2017

Rusia responde a las sanciones de Estados Unidos: le exige reducir el personal de su embajada


El Ministerio de Exteriores ruso le ordenó el viernes a Estados Unidos reducir la presencia diplomática en su territorio. La embajada y los consulados estadounidenses tendrán que achicar su plantilla a un total de 455 personas a partir del 1 de septiembre.

Además, las autoridades rusas incautaron propiedades pertenecientes a la delegación diplomática. 

Se trata de dachas ubicadas en las afueras de Moscú, que servían como lugar de recreo del personal, y almacenes que eran utilizados como depósitos en la capital del país.


Las medidas son una respuesta a la decisión tomada horas antes por el Senado estadounidense, que dio luz verde a un nuevo paquete de duras sanciones económicas contra Rusia, Irán y Corea del Norte, que deberán ser firmadas por el presidente Donald Trump. 

La legislación impide que el mandatario alivie o ignore los castigos a Moscú a menos que obtenga la autorización del Congreso.

Para el Kremlin, las nuevas penalidades son una prueba de "rusofobia". "Se trata ante todo de una histeria antirrusa que tiene el propósito de utilizar los sentimientos contra Rusia con fines de política nacional, en la lucha entre el presidente Trump y sus oponentes políticos", afirmó el presidente Vladimir Putin en rueda de prensa durante una breve visita a Finlandia el jueves.

En esa misma declaración, ya había advertido que iban a tomar represalias. "Nos estamos portando de una manera muy contenida y paciente, pero en algún punto necesitaremos responder. Es imposible tolerar indefinidamente este tipo de insolencia a nuestro país", dijo.

Pero Putin no sólo ha respondido a las sanciones ejecutadas por el Congreso estadounidense esta semana. 

El malestar venía de diciembre, cuando en una de sus últimas decisiones como presidente, Barack Obama expulsó a 35 diplomáticos rusos acusados de espías e incautó dos complejos que eran utilizados por la delegación, luego de que surgieran las primeras evidencias de la interferencia rusa en las elecciones.

El Ministerio de Exteriores ruso le había aconsejado a Putir tomar represalias inmediatamente después, pero en un gesto de buena voluntad hacia la inminente asunción de Trump, el mandatario había optado por dejarlas en suspenso. 

La paciencia parece haber culminado hoy.

Las sanciones fueron tema de conversación durante el primer encuentro que mantuvieron los dos presidentes, semanas atrás durante la cumbre del G20 en Hamburgo. Frente a los periodistas, los dos sostuvieron que el intercambio fue "muy positivo".

@infobae