El alcalde es criticado por los dominicanos por mantener una activa política de multas que abarcan desde las leyes de tránsito hasta contravenciones civiles de menor grado.
Uno de sus más recientes anuncios es que no quiere bicicletas eléctricas en las calles. Sus conductores serán multados por diferentes violaciones.
Esas bicicletas son usadas para las entregas a domicilio que hacen restaurantes, cafeterías, delicatesen, liquor stores y otros establecimientos gerenciados por dominicanos, en los que se ofrece el servicio de delivery a los clientes.
Los líderes dominicanos convocaron a un acto el 8 de abril en el que anunciaron su respaldo a las aspiraciones del alcalde, pero hasta ahora la estrategia no ha dado los resultados que esperaba la campaña del alcalde.
El evento se realizó frente al local del Club Demócrata por un Cambio en el Norte de Manhattan, en la 210 de la avenida Sherman, donde el alcalde agotó un turno remachando su defensa a los inmigrantes.
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