domingo, 22 de julio de 2018

El Zar en el aire: así es el lujoso avión invisible para los radares en el que viaja Vladimir Putin






Como si fuera el Rey Midas. El avión que transporta a Vladimir Putin en sus viajes al extranjero es un palacio con alas. El líder ruso ordenó la remodelación por dentro de la aeronave presidencial IL-96-300 para equiparla con zonas para trabajar, descansar y hacer ejercicio. Es prácticamente indetectable para los radares, tiene un canal de comunicación para lidiar con conflictos desde el aire y cuesta cerca de 500 millones de dólares.

Existen cuatro aviones idénticos por motivos de seguridad, y no se conoce en cuál viaja Putin en el momento de despegue para garantizar la protección del mandatario. Tiene una autonomía suficiente como para salir del Aeropuerto Internacional de Moscú y aterrizar en la Antártida. Eso sí, apurando el combustible.

Le acompaña en todos los viajes que lleva a cabo fuera del país, es un lugar en el que Vladimir puede descansar en su habitación, darse una ducha a 12.000 metros de altura o hacer ejercicio en cualquiera de las tres elípticas disponibles. También está preparada para alojar conferencias de trabajo con sus asesores. Así es por dentro:

Si quiere viajar como el resto de mortales, sentado en su asiento con el cinturón puesto, Putin tiene donde elegir: sofás revestidos de cuero color crema, asientos individuales con mesa, acceso a las ventanas para comprobar su escolta aérea de combate… Lo que él quiera.

Vladimir Putin no se preocupa por elegir entre ventana o pasillo. De hecho, el líder ruso tiene vistas desde los corredores del avión. Y por si acaso, también tiene más sofás de cuero, mesas y lámparas para facilitar el viaje.

REUTERS