Un jurado de Brooklyn lo declaró culpable el miércoles por robo, asalto y otros cargos, informó New York Post.
Desde que fue acusado en 2018, estuvo colocado en servicio modificado en sus labores en la Comisaría 94, en Brooklyn. Ahora fue despedido por la policía de Nueva York después del veredicto.
Delacruz dijo inicialmente que había abierto fuego porque cinco hombres lo habían robado mientras se encontraba fuera de servicio en un club de Bushwick.
La historia de Delacruz comenzó a desmoronarse cuando las imágenes de vigilancia no mostraron ningún ataque en su contra. Por el contrario, se le vio apuntando su arma de servicio a Justin Eilely y ordenándole que se desvestiera.
Luego tomó el dinero en efectivo y el teléfono celular de Eilely, antes de golpearlo con el arma de fuego emitida por NYPD.
El fiscal del distrito de Brooklyn, Eric González, alabó el veredicto y calificó las acciones de Delacruz de “verdaderamente aborrecibles”.
@eldiariony
