La adolescente Esmeralda Richiez fue sometida a una actividad sexual violenta, que causó un sangrado, provocando que su corazón sea incapaz de bombear suficiente sangre a su cuerpo hasta que le provocó la muerte.
Así lo especifican los estudios al que fue sometido el cuerpo de la menor realizados por el Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif).
En un principio los familiares de Esmeralda denunciaron que a la menor le habían dado a tomar unas píldoras abortivas, que posteriormente le provocó un sangrado. Sin embargo, la autopsia indica que la adolescente fue sometida a una actividad sexual violenta que desencadenó en un shock hipovolémico.