lunes, 11 de octubre de 2010

“Figueroa Agosto parece que cantó y deben haber cantado otros”.


Escrito por: EL DÍA

Santo Domingo.-El brazo de la justicia de Estados Unidos podría extenderse hasta la República Dominicana, ya que informaciones resultantes de los interrogatorios practicados en Puerto Rico a José David Figueroa Agosto han permitido desvelar importantes conexiones de la estructura criminal a la que él pertenece con agentes dominicanos de la Policía Nacional, las Fuerzas Armadas, la Dirección Nacional de Control de Drogas y la Dirección Nacional de Investigaciones (DNI).

Varios de los 133 agentes detenidos en Puerto Rico, incluyendo a 90 policías de ese país, estaban vinculados a la banda que allí dirige Ángel Ayala Vásquez (conocido como Ángelo Millones) y de la que Figueroa Agosto era el más importante miembro en la “extensión dominicana”.

Sin embargo, las autoridades dominicanas han preferido mantener en bajo perfil lo relativo a la investigación sobre la complicidad de agentes dominicanos y de eventuales pedidos de extradición.

El único que ha tocado el tema, sin ofrecer muchos detalles, es Marino Vinicio Castillo, quien afirma que el “horno no está para galletitas”. A su entender la operación realizada en Puerto Rico tendrá efectos directos en la República Dominicana.

“Figueroa Agosto parece que cantó y deben haber cantado otros”.

El operativo realizado en Puerto Rico fue dirigido por el Buró Federal de Investigaciones (FBI) en colaboración con el jefe de la policía de esa isla, José Figueroa Sancha, quien ha venido al país en varias ocasiones a raíz de las investigaciones sobre la red de Figueroa Agosto.

Informaciones suministradas por el propio capo boricua y otras recolectadas por investigaciones de las autoridades vinculan a una gran cantidad de agentes dominicanos a la red de protección que durante diez años permitió que Figueroa Agosto y sus cómplices actuaran con libertad desde la República Dominicana.

La DNCD sometió hace varias semanas a ocho oficiales policiales a los que acusa de ser parte de la estructura de protección del capo y que se mantuvieron dándole informaciones cuando éste escapó del país el año pasado.