Por Grey Núñez C.
Mis mas de 30 años como un actor, si se quiere importante en los medios de Comunicación del país, me dan el suficiente aval, independientemente del periodo en que me ha tocado ser parte de la política de comunicación del actual gobierno, para poder diferenciar, de manera juiciosa, no política, las diferentes etapas de la Dirección de Información, Prensa y Publicidad de la Presidencia de la Republica.
Siendo un adolescente, escuchaba hablar de Rafael Vidal Martínez, asistente en materia de prensa del fenecido Presidente, Joaquín Balaguer y era solo eso, asistente de prensa del Presidente de entonces, donde no existía una clara y definida estructura, que definiera o ejecutara, una estrategia de comunicación gubernamental.
Fue en el gobierno del entonces Presidente, Salvador Jorge Blanco, (1982/1986), cuando se crea la Oficina de Información y Prensa gubernamental. Transcurrido ese periodo, se mantuvo como tal, en los gobiernos sucesivos de Balaguer (1986/1990, 1990/1994 y 1994/1996); Leonel Fernández (1996-2000) e Hipólito Mejía (2000/2004).
Desde el primer gobierno de Fernández(1996-2000),la Dirección de Información, Prensa y Publicidad de la Presidencia, acogió a varios incumbentes, periodistas todos conocidos y capaces, como Miguel Guerrero, Virgilio Alcántara y Adriano Miguel Tejada, en cuyas gestiones, desarrollaron una política de Información gubernamental, sin una gran definición estratégica, ni mucho menos estableciendo una gran estructura operacional.
El departamento, funcionó, sin exhibir avances extraordinarios, es posible, que incidiera en esto, la falta de un instrumento de soporte, sabiendo las debilidades de que adolecía en aquel entonces, el Partido de la Liberación Dominicana, que por primera vez, dirigía los destinos del país.
El gobierno del Presidente Hipólito Mejía, desarrolló una política de comunicación, que no se puede catalogar de haber sentado grandes bases para dar un rumbo diferente a todo lo que había ocurrido hasta su llegada al poder, contrario a eso, lo que hizo fue, dispersar los recursos en materia de comunicación, ya que creó otra oficina paralela, para tratar de “limar asperezas” entre dos actores de la comunicación, que no podían convivir juntos, es así como surge el Centro de Información Gubernamental.
Con la creación de ese nuevo instrumento, el gobierno de Mejía, destina los recursos en materia comunicacional, en dos presupuestos independientes y políticas diferentes, que nunca lograron unir voluntades en pro de establecer una clara y uniforme estrategia de posicionamiento de la gestión gubernamental en los medios de comunicación del país y lograr así una percepción positiva en la población.
Contario a como algunos piensan hoy, respecto a la inversión económica comunicacional, en aquel entonces, se destinaron grandes recursos económicos, sin resultados favorables, ni respondiendo a una determinada estrategia en los diferentes medios a nivel nacional.
Con el retorno al solio presidencial del Dr. Leonel Fernández, se diseña un nuevo esquema en materia de comunicación oficial, que comienza con la designación en la Dirección general, de un Periodista, que conoce plenamente su trabajo y está íntimamente ligado con el partido gobernante, desde prácticamente su creación, pero sobretodo, amigo personal del Presidente Fernández.
Esto lo identifica con su estructura y conoce al dedillo de las debilidades expuestas anteriormente, es un hombre que tiene bien claro, la gran tarea que tendría por delante, que conoce muy bien las deficiencias arrastradas históricamente por la agrupación política que regresa al poder, consciente de esa realidad.
Su eficiente labor como Periodista de mil batallas, lo colocan en un nuevo rol, dirigir la política de comunicación del nuevo gobierno en el año 2004. No es otro que Rafael Núñez, con una hoja de servicio periodístico desde diferentes medios, escritos y electrónicos, siempre en defensa de los mejores intereses de su pueblo y enalteciendo la labor del periodista.
En poco tiempo, Núñez, se hace acompañar de una sólida estructura de Prensa en todo el territorio nacional, preparado para poner en acción el más organizado proyecto en materia de comunicación, como nunca antes se había puesto en marcha desde la casa de gobierno.
La gran labor desplegada por el equipo de Prensa oficial dirigido por Rafael Núñez, ha escrito una historia sin igual en los archivos que reposan en el Palacio Nacional, desde el año 2004, hasta la fecha.
Núñez, ha logrado colocar a la Dirección de Información, Prensa y Publicidad de la Presidencia a la altura que demandan los nuevos tiempos, estableciendo allí la mas alta tecnología, no en la adquisición de equipos, sino de que la gestión del Presidente Leonel Fernández, se haya insertado en los nichos de recepción al alcance de todos aquellos que poseen la manera de hacerse eco de una histórica gestión, implementando las mas modernas herramientas en esta era digital de sofisticada tecnología, donde se incluye un canal de televisión por Internet, que es modelo en toda el área del caribe y Centroamérica.
Estando en Costa Rica, se me preguntaba, cómo se había podido establecer la exitosa política comunicacional desde el gobierno, que se ha puesto en práctica en la Republica Dominicana.
Meses mas tarde, fui receptor en Panamá, de la misma pregunta, por parte de un importante periodista de aquella nación. Lo cierto es, que otros países, han querido implementar el modelo ejecutado por el lic. Rafael Núñez.
Haber integrado una política de comunicación en base a los denominados,”Gabinetes de Comunicación”, ha sido sin duda, la obra que catapulta la gestión en materia de comunicación que ha dirigido el Sr. Núñez.
Un logro, que también se convierte en histórico, es la armoniosa relación que se da entre Gobierno y Prensa, con pleno respeto a la libertad de expresión, producto de una gestión eficiente y vigorosa en esa materia.
Y es posible, sin temor a equívocos, que estamos ante la más grande conquista de gobierno alguno en ese importante renglón de la administración publica, y sin haber hecho el despilfarro de recursos de gestiones anteriores, que no hicieron otra cosa que no fuese, emitir notas y videos.
Es señoras y señores, la más loable y efectiva labor desde los medios de comunicación a favor de un gobierno, jamás vista en la historia política dominicana, de la que el Sr. Rafael Núñez, puede sentirse orgulloso y el Excelentísimo Sr. Presidente, eternamente agradecido.
Hasta el próximo comentario.