SANTO DOMINGO. Francisco Alberto Carela Castro, sindicado como cabecilla de una red que se dedicaba a grabar a personas en moteles para luego extorsionarlos, reveló que llegó a "un arreglo" con la Fiscalía de Santiago, a cambio de ponerlo en libertad a él, a su padre que guarda prisión y a su madre.
El imputado, con edad de 35 años, alega que las acciones en su contra se tratan de una supuesta presión, "para que yo aporte un expediente de un caso que yo investigué en Santiago y donde llegué a un arreglo con la fiscal de allá".
"Me dijeron que si yo le entregaba ese expediente me iban a soltar a mi padre que estaba preso y a mi madre que es doctora de este gobierno", afirmó.
También denunció que hace unos días lo secuestraron en la Policía y supuestamente le inyectaron drogas.
Tras declararse inocente de los cargos instrumentados en su contra, dice que no hay pruebas que lo incriminen.
Carela, quien ayer a las 11:00 a.m., fue trasladado desde el Palacio de Justicia de Ciudad Nueva a Santiago, narra que se formó dentro de la Policía, donde pasó por la mayoría de los departamentos.
"Sé cómo funciona eso, y aproveché lo bueno de ella", dijo.
Ante el juez de Atención Permanente del Distrito Nacional, José Alejandro Vargas, quien dictó prisión preventiva en su contra, sostuvo que "salí de la Policía por cuestiones económicas porque no podía mantener a mi familia".
A seguidas, explica que se encontró con un hombre al que sólo identifica como Francisco, quien le ofreció el mismo trabajo que hacía en la Policía.
Luego, dijo que formó su propia empresa. "Con el tiempo y gracias a las autoridades de este gobierno he avanzado mucho", recalcó.
En su exposición, Carela Castro aseguró que tiene clientes en todas partes y que supuestamente está asesorado por el FBI y ha hecho investigaciones para la propia Policía.
Carela Castro precisó que ha logrado atrapar a violadores en el país y viajado a todo Centroamérica, Ecuador y Panamá, por razones de trabajo.
El imputado fue arrestado en un hotel de Santiago, el día 4 de este mes. Mientras que durante un allanamiento en su negocio fueron encontradas 106 evidencias y 53 en la casa de éste.
Con él suman cuatro los imputados bajo medidas de coerción. Otro enviado a prisión es José Bianney García, quien admitió que hace tres meses trabaja en grabaciones para "investigaciones privadas que se hacen en la compañía".
"Algunas de esas camaritas se instalaban dentro de las cabañas para hacer el trabajo, con esto es que yo mantengo a mis hijos", sostuvo.
Los otros dos son Marino Enrique Carela Vilorio y el taxista Body Antonio del Rosario Ciprián, a quienes les impusieron fianzas.
lo trasladan a santiago
Alberto Carela Castro, preso por espiar parejas en cabañas de Santo Domingo, fue trasladado a Santiago donde ayer fue interrogado por varias horas por la fiscal de Santiago, Yenny Berenice Reinoso. El imputado es investigado por el atentado al comunicador Jordi Veras, quien ayer abandonó el país por el Aeropuerto de Las Américas con su esposa e hijos con destino a Houston, Estados Unidos. El abogado de Carela Castro, Rubén Santos, calificó de irregular el traslado de su cliente a Santiago.
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