El mundo necesita el fortalecimiento del entorno familiar, existe escasez de valores que se han estado perdiendo en la medida que transcurre el tiempo.
Ya el papá no tiene espacio disponible para jugar con sus hijos, as, y eso va deteriorando la relación.
Resulta que la sociedad es fuerte, según sean los principios que se vayan levantando, lo que cosechamos hoy, es el fruto de lo que sembramos ayer.
Una práctica muy positiva como es la de orar en familia, parece estar en deshabituación y fuera de contexto.
Aunque muchos padres hoy tengan dificultades en el diario vivir, esto no debe constituirse en una excusa como para no sacar tiempo para enseñar el principio de la oración, que es hablar con Dios.
Es una bendición.
Todos tenemos la imperiosa necesidad de dialogar con nuestro supremo hacedor, él está solícito por ese momento tan especial. 'Clama a mí, y yo te responderé, y te enseñaré cosas grandes y ocultas que tú no conoces." Jeremías 33:3.
Oración:
Señor del Cielo y de la Tierra, Padre de las luces, mi Rey, mi Castillo Fuerte, mi Dios en quien confiaré, hoy levanto un altar que haga subir un incienso agradable ante tu presencia, para interceder en favor de que la oración, alimento espiritual que desciende de ti como un don perfecto, y que se constituye en la respiración del cristiano y del alma, sea retomada de nuevo en aquellos lugares donde un día era una realidad. Y donde nunca ha estado, ni ha sido parte, hoy sea establecida como instrumento fundamental para toda la familia.
Que así sea, Señor, para tu gloria, en el nombre de Jesús. Amén.
Nuevas del bien,
Pastor Antonio Regalado
Congregación Maranatha, Inc.
15 South Main Street
Uxbridge, MA 01569
(508) 820-8084