Es una vieja práctica y al parecer incurable, el hecho de que si no son nominados a los premios Casandra los artistas cuyos cronistas de arte les sirven de relacionistas publicos, éstos inmediatamente inician una campaña de descrédito en contra de los mismos.
Desde que se anunció el listado de nominados hace varios días, algunos miembros de la Asociación de Cronistas de Arte( ACROARTE), que esperaban fueran tomados en cuenta sus representados, han estado utilizando sus medios para despotricar en contra de El Casandra, y no sólo eso, si no que también se han dedicado a resaltar todos los comentarios negativos que hace el publico o personas ajenas a la institución con relación a los premios.
Así no.