Gran expectación ha despertado en esta ciudad el nombramiento del próximo dirigente de las Aguilas Cibaeñas, 20 veces campeones nacionales, con miras a la venidera edición del Torneo de Béisbol Invernal.
Tras la reciente renuncia de Tony Peña, el puesto ha quedado acéfalo aunque se barajan los nombres de Miguel -Guelo-Diloné y Félix Fermín para ocuparlo.
De hecho, cuando dimitió del cargo, Peña sugirió a la directiva aguilucha a Diloné para que éste asumiera la conducción del conjunto.
Sin embargo, sin bien han circulado rumores, hasta el momento no se ha ofrecido ninguna información oficial al respecto, aún cuando se espera que esto ocurra en las próximas horas.
El tema ha cobrado primacía en los últimos días en medios locales y en diversos sondeos que han hecho programas deportivos -de radio y televisión- la fanaticada cibaeña ha expresado su simpatía en que cualquiera de los dos ocupe la citada función.
En ese contexto, han coincidido en reconocer de que, en ambos casos, se trata de “dos auténticos aguiluchos”, figuras emblemáticas, genuinos representantes de la mística y la tradición de la escuadra cibaeña, cuyas trayectorias profesionales, tanto como jugadores o como dirigentes, están ligadas intrínsecamente a este club.
Por años Miguel -Guelo-Diloné, quien se desempeñó en los jardines y fue bautizado como “La Saeta de Santiago” por su velocidad y electrizante estilo de juego, se constituyó en jugador franquicia de las Aguilas.
Tras la reciente renuncia de Tony Peña, el puesto ha quedado acéfalo aunque se barajan los nombres de Miguel -Guelo-Diloné y Félix Fermín para ocuparlo.
De hecho, cuando dimitió del cargo, Peña sugirió a la directiva aguilucha a Diloné para que éste asumiera la conducción del conjunto.
Sin embargo, sin bien han circulado rumores, hasta el momento no se ha ofrecido ninguna información oficial al respecto, aún cuando se espera que esto ocurra en las próximas horas.
El tema ha cobrado primacía en los últimos días en medios locales y en diversos sondeos que han hecho programas deportivos -de radio y televisión- la fanaticada cibaeña ha expresado su simpatía en que cualquiera de los dos ocupe la citada función.
En ese contexto, han coincidido en reconocer de que, en ambos casos, se trata de “dos auténticos aguiluchos”, figuras emblemáticas, genuinos representantes de la mística y la tradición de la escuadra cibaeña, cuyas trayectorias profesionales, tanto como jugadores o como dirigentes, están ligadas intrínsecamente a este club.
Por años Miguel -Guelo-Diloné, quien se desempeñó en los jardines y fue bautizado como “La Saeta de Santiago” por su velocidad y electrizante estilo de juego, se constituyó en jugador franquicia de las Aguilas.