Autor Miguel De Jesús
Abogado y Comunicador Dominicano
Jennifer Perdomo, es una niña que desde pequeña aprendió a decirme tío, por la amistad hasta llegar a la hermandad que me une a su padre Quilvio Perdomo un consagrado comunicador y de los principales programadote de radio en los Estados Unidos.
En un sábado de febrero con la bendición de Dios y el amor de sus padres mi sobrina sonreía ante la llegada de sus 15 años.Doña Mercedes Belliard (MI COMADRE) y madre de la festejada a pesar de su timidez y ser de poco hablar no podía ocultar su alegría.
A Jennifer le han inculcado buenas costumbres, respeto por los demás y amor a Dios. El amor de su madre se unía al de sus hermanitas Merkis y Keyla para llenar de magia aquella fiesta bonita.
Quilvio no ha puesto limites a todo tipo de sacrificios, para construir con amor sincero el mejor de los mundos a sus 3 hijas, sabemos desde aquí que los latidos de su Corazón esa noche solo bombardeaban la pureza de un autentico amor.
Antes de bailar, se rindió culto a la existencia de un Dios, ese ser supremo que permite cada día que los Perdomo y Belliard se eleven desde la belleza de la creación hasta la altura de sus sueños.
Una fiesta de 15 años con la humildad que a mis compadres Quilvio y Mercedes los lleva a la grandeza y nobleza que nos hacen orgullosos de pertenecer a su círculo familiar, donde hasta Poochi el perrito de la casa tiene su espacio y valor.
Jennifer nunca pierdas la inspiración de conocer nuevos caminos, de hacer realidad cada sueño y alcanzar las metas trazadas. A la distancia te expreso mi cariño ahora que perdí una sobrina niña, para ganar una sobrina señoriíta desde aquí te doy mi bendición