sábado, 14 de abril de 2012

Sencillamente ridículo que estos senadores le pidan “perdón”


Barack Obama es orgulloso descendiente de un africano nieto de esclavos, como millones de negros africanos. Con esa orgullosa negritud africana, ha hecho su carrera política, hasta llegar a la Casa Blanca. Él, su mujer y sus hijos, todos negros, jamás se han ofendido porque les digan eso: negros. Por eso, es sencillamente ridículo que estos senadores le pidan “perdón” (con trasunto racista) a Obama, porque Hipólito Mejía dijo que ese negro vino de África.

Por Ramón Colombo