SAN JUAN. La creciente presión policial sobre la frontera norte de México está haciendo que la droga colombiana se abra camino por rutas alternativas en el Caribe, donde Puerto Rico se ha convertido en una de las principales puertas de acceso a Estados Unidos.
Así lo explicó hoy a Efe el jefe de la Dirección Estadounidense Antidrogas (DEA) para la región del Caribe, Pedro Janer, quien detalló que esa presión en la frontera mexicana ha provocado que las bandas de narcotraficantes pongan su punto de mira en el Caribe como ruta alternativa para introducir cocaína en el país norteamericano.
Janer, que dirige su departamento desde San Juan, apuntó que los narcotraficantes, a medida que se ha endurecido la tradicional vía mexicana, han mirado hacia el Caribe, donde se han abierto varios corredores, y advirtió de que en las últimas fechas se ha detectado un incremento de la actividad en la llamada Ruta del Este.
La Ruta del Este nace en Colombia y Venezuela, desde donde los cargamentos de droga viajan a pequeñas islas del Caribe como Tórtola o Antigua, pasando previamente por República Dominicana, país que juega el papel de almacén para Puerto Rico.
Esta isla, territorio estadounidense desde 1898, recibe la droga almacenada en República Dominicana para convertirse en el último trampolín antes de alcanzar la costa este de Estados Unidos.
"La droga, una vez en Puerto Rico, es mucho más fácil de hacerla llegar al Estados Unidos continental", afirmó Janer, tras explicar que los medios utilizados por el narcotráfico van desde contenedores de barcos hasta aviones que salen del aeropuerto de San Juan, pasando por el uso de compañías de correo postal.
Así lo explicó hoy a Efe el jefe de la Dirección Estadounidense Antidrogas (DEA) para la región del Caribe, Pedro Janer, quien detalló que esa presión en la frontera mexicana ha provocado que las bandas de narcotraficantes pongan su punto de mira en el Caribe como ruta alternativa para introducir cocaína en el país norteamericano.
Janer, que dirige su departamento desde San Juan, apuntó que los narcotraficantes, a medida que se ha endurecido la tradicional vía mexicana, han mirado hacia el Caribe, donde se han abierto varios corredores, y advirtió de que en las últimas fechas se ha detectado un incremento de la actividad en la llamada Ruta del Este.
La Ruta del Este nace en Colombia y Venezuela, desde donde los cargamentos de droga viajan a pequeñas islas del Caribe como Tórtola o Antigua, pasando previamente por República Dominicana, país que juega el papel de almacén para Puerto Rico.
Esta isla, territorio estadounidense desde 1898, recibe la droga almacenada en República Dominicana para convertirse en el último trampolín antes de alcanzar la costa este de Estados Unidos.
"La droga, una vez en Puerto Rico, es mucho más fácil de hacerla llegar al Estados Unidos continental", afirmó Janer, tras explicar que los medios utilizados por el narcotráfico van desde contenedores de barcos hasta aviones que salen del aeropuerto de San Juan, pasando por el uso de compañías de correo postal.