Fue rematado en Londres en 65.500 dólares. Los especialistas creen que en la actualidad sólo quedan tres unidades de la emblemática marca británica: dos en Japón y uno en Inglaterra, que ya están restaurados
El automóvil fabricado en mayo de 1959, que conserva la mayoría de sus piezas originales, fue vendido por la casa Bonhams de la capital inglesa. El vehículo, perteneciente al modelo Seven De Luxe Saloon y con matrícula XLL 27, fue producido en una fábrica del centro de Inglaterra y se considera el Mini más antiguo que existe sin que haya sido refaccionado.
Los expertos creen que existen sólo tres unidades de este emblemático modelo británico: dos en Japón y uno en Gaydon (centro de Inglaterra) dentro de la colección de la Fundación del Patrimonio de la Industria del Motor Británica, aunque todos ellos ya han sido restaurados.
En el caso del XLL 27, que no se ha puesto en marcha durante años, pocas piezas se han cambiado desde que salió de la línea de producción en 1959. Esto a excepción de la puerta del conductor y las alfombras del interior del vehículo, que debieron ser reemplazadas.
En cambio, el resto de la carrocería y la tapicería, la pintura exterior, el panel de instrumentos, el motor, la transmisión y la matrícula siguen siendo las originales.
El automóvil fabricado en mayo de 1959, que conserva la mayoría de sus piezas originales, fue vendido por la casa Bonhams de la capital inglesa. El vehículo, perteneciente al modelo Seven De Luxe Saloon y con matrícula XLL 27, fue producido en una fábrica del centro de Inglaterra y se considera el Mini más antiguo que existe sin que haya sido refaccionado.
Los expertos creen que existen sólo tres unidades de este emblemático modelo británico: dos en Japón y uno en Gaydon (centro de Inglaterra) dentro de la colección de la Fundación del Patrimonio de la Industria del Motor Británica, aunque todos ellos ya han sido restaurados.
En el caso del XLL 27, que no se ha puesto en marcha durante años, pocas piezas se han cambiado desde que salió de la línea de producción en 1959. Esto a excepción de la puerta del conductor y las alfombras del interior del vehículo, que debieron ser reemplazadas.
En cambio, el resto de la carrocería y la tapicería, la pintura exterior, el panel de instrumentos, el motor, la transmisión y la matrícula siguen siendo las originales.