Santo Domingo.-El juez de Ejecución de la Pena de San Cristóbal, José Medrano Kelys, dispuso el pasado viernes la libertad del exbanquero Marcos Báez Cocco, condenado a 10 años de prisión por el fraude en el Banco Intercontinental (Baninter).
Medrano Kelys adoptó la decisión al variarle la modalidad de la prisión por el arresto domiciliario, debido a los problemas de salud que desde años padece Báez Cocco.
La decisión establece que la prisión domiciliaria es revisable dentro de tres meses. Mientras que el Consejo de Defensa del Banco Central se oponía al pedimento bajo el alegado de que el exvicepresidente del Baninter no tiene una enfermedad terminal. El Banco Central todavía no ha determinado si recurre la decisión de la medida.
El pasado mes de marzo el exbanquero fue recluido en la clínica Abreu aquejado de problemas neurológicos.
En ese momento el director de Prisiones, Mario Acosta, dijo que los informes recibidos en la entidad decían que el interno tenía problemas graves de salud y que en ocasiones “el cerebro se le quedaba en blanco”.
Báez Cocco fue condenado a 10 años de prisión, al igual que Ramón Báez Figueroa y Luis Rafael Álvarez Renta. Mientras que Vivian Lubrano de Castillo fue sentenciada a 6 años, la indultaron meses después.
Medrano Kelys adoptó la decisión al variarle la modalidad de la prisión por el arresto domiciliario, debido a los problemas de salud que desde años padece Báez Cocco.
La decisión establece que la prisión domiciliaria es revisable dentro de tres meses. Mientras que el Consejo de Defensa del Banco Central se oponía al pedimento bajo el alegado de que el exvicepresidente del Baninter no tiene una enfermedad terminal. El Banco Central todavía no ha determinado si recurre la decisión de la medida.
El pasado mes de marzo el exbanquero fue recluido en la clínica Abreu aquejado de problemas neurológicos.
En ese momento el director de Prisiones, Mario Acosta, dijo que los informes recibidos en la entidad decían que el interno tenía problemas graves de salud y que en ocasiones “el cerebro se le quedaba en blanco”.
Báez Cocco fue condenado a 10 años de prisión, al igual que Ramón Báez Figueroa y Luis Rafael Álvarez Renta. Mientras que Vivian Lubrano de Castillo fue sentenciada a 6 años, la indultaron meses después.