Escrito por: MARIEN ARISTY CAPITÁN (m.capitan@hoy.com.do)
Una campaña por internet a cargo de organizaciones sociales trata de demostrar que con lo que cuestan la propaganda gubernamental excesiva y las altas pensiones, como la que se autoadjudicó Ivanhoe Ng Cortiñas, se podrían contratar miles de maestros con buenos salarios y subir los sueldos de más de cien agentes policiales.
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Con los RD$1,734,000,000 gastados en publicidad y propaganda gubernamental de enero a septiembre del 2012 se pueden contratar 10,299 maestras con un salario mensual de RD$17,268 por un año. Su sueldo actual es de alrededor de RD$8,900.00 por una tanda. ¡No nos digan que no se puede!
Este es el primero de seis mensajes que, bajo el lema ¡No nos digan que no se puede!”, las “organizaciones sociales por un pacto social justo” han puesto a circular desde el jueves pasado en las redes sociales con el propósito de decirle al Gobierno que el déficit fiscal tiene su origen en la forma en la que se ha manejado el gasto público. También que, si éste se reorienta, se puede invertir en lo que se necesita.
El mejor ejemplo de ello es lo que dicen acerca de Educación: “Con los RD$187 mil millones que se gastaron de más, se pudo invertir no el 4%, sino el 8% del PIB en educación”.
El tema de las pensiones también está presente. “Con la pensión que quería Ivanhoe NG Cortiñas se podría duplicar el salario de 102 rasos de la Policía. Actualmente cobran RD$6,357 al mes”, lamentan.
Por otro lado, se quejan por la inversión hecha en el Metro de Santo Domingo. “Lo que costó la primera línea del Metro, según el Gobierno es 40 veces lo que se invirtió en 2009 en agua potable y alcantarillado. En 2007 todavía el 41% de la población no tenía acceso a agua pública dentro de su vivienda y el 70% pagaba para consumir agua potable”.
El sexto mensaje tiene que ver con las viviendas. “Con los RD$1,080 millones invertidos en el Residencial El Progreso de la Luperón se podrían haber construido 2,231 viviendas sociales. Según la ONE hacen falta 719,990 viviendas nuevas en el país”.
Así, con números y ejemplos tangibles, han decidido reclamar. ¿Alguien les escuchará? El tiempo dirá.
