Escrito por: Agencias
Nueva York.-¿Ven la película que están viviendo ahora los Yankees de Nueva York con un Alex Rodríguez deportivamente disminuido?
No se desesperen. En unos años se proyectará la segunda parte con los Angelinos de Los Ángeles.
No se trata de comparar a A-Rod con Albert Pujols. Son peloteros diferentes, con sus orígenes en ‘Quisqueya La Bella’ quizás como único punto de contacto. Ah, y ambos con contratos de más de 200 millones por diez años, a pesar de que al momento de sus respectivas, ya eran peloteros veteranos.
Cuando los Vigilantes de Texas le dieron a Rodríguez aquel pacto por 252 millones en el invierno del 2000, era quizás el mejor pelotero de todo el béisbol, con apenas 24 años y un mundo que dar sobre el terreno.
De todos modos, entonces fue un shock, por el exuberante monto que no tenía precedentes y sigue sin tenerlo. Aquel contrato hubiera terminado en el 2010 y aunque aquella fue una buena campaña, con 30 bambinazos y 125 carreras impulsadas, ya los años habían comenzado a hacer mella en el físico del pelotero, que desde el 2008, había comenzado a promediar 133 juegos por temporada.
Entonces, habría podido optar por la agencia libre o por una renovación por un período de tiempo más sensato.
Pero donde los Yankees se equivocaron de medio a medio fue en la restructuración del contrato por otras diez campañas después de la temporada del 2007, cuando Alex ya había cumplido 31 años y además había mostrado su incapacidad para sobresalir en los playoffs, una etapa en la que el equipo es invitado habitual.
Y es ahora cuando se ven las consecuencias.
El equipo está atado de pies y manos, a un jugador casi imposible de ser pieza de cambio.