En el último caso, un presunto comunicador y productor de un programa de televisión fue sorprendido en el área del Departamento de Recuperación de Vehículos de la PN en Santiago tratando de robarse dos espejos de una jeepeta del 2012 que había sido dejada estacionada en el lugar por un subsecretario de Salud Pública.
Sobre este caso, la Policía Nacional guarda un hermético silencio, y se ha rehusado identificar al alegado comunicador sorprendido en esa práctica, afirmando que el caso se está investigando. Los espejos de los vehículos están valorados en 15 mil pesos cada uno.
Además de su vinculación a estos hechos de supuestos comunicadores que acuden a la Policía Nacional en Santiago, también casi a diario se conoce de quejas de personas que han sido estafadas y extorsionadas por estos delincuentes, que se hacen llamar periodistas.
En cuanto al alegado comunicador sorprendido tratando de robar los espejos de la citada jeepeta, el pasado martes periodistas y comunicadores presionaron al coronel Cordero Paredes, vocero de la Policía Nacional en Santiago, para que identificara al autor del hecho, pero este evadió, diciendo que se está investigando ese caso.
¨En Santiago, cualquiera coge una cámara de vídeo, y ya dice ser periodista, para dedicarse a estafar y a extorsionar sin que ningún gremio tome medida para impedir esta grave situación que empaña la imagen de la clase periodística de la Ciudad Corazón ¨, se quejó un verdadero periodista que cu bre la fuente policial y se rehusó a ser identificado.
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