Con el objetivo de “llevar un mensaje positivo, bien bonito”, en palabras de su abogada Lara Helena Castro Ward, llegó Tempo a la Isla cerca de las 10:00 de la noche para cumplir con los últimos seis meses de la sentencia federal que se le impuso por narcotráfico hace ocho años.
“Este es un día histórico para Puerto Rico, que lo ha apoyado muchísimo. Su mensaje es contra las drogas, contra la violencia. Viene lleno de ánimo”, agregó la abogada minutos antes de que el rapero ponceño llegara al aeropuerto Luis Muñoz Marín en Isla Verde, Carolina, donde lo recibió con aplausos y gritos un grupo de decenas de fanáticos.
La conmoción de Tempo era evidente en el movimiento zigzagueante de sus piernas, probablemente traicionadas por la emoción de volver a pisar su patria, donde hasta hubo un movimiento denominado “Free Tempo”, con camisetas alusivas a ese eslogan.
“¡Por fin se hace justicia!”, gritaron otros seguidores al intentar sin éxito abrazarlo y tropezar con sus cuatro maletas.
“Somos de distintas partes de la Isla, somos los más fanáticos de Tempo y aquí dándole apoyo”, dijo uno de ellos optando por el anonimato
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