SANTO DOMINGO, República Dominicana (Julián Herrera/Acento.com.do).-Una auditoría hecha por la Cámara de Cuentas de la República (CCR) al Ministerio de Interior y Policía, durante la gestión de Franklin Almeyda Rancier, reveló que tres mujeres cobran ingreso de hasta 300 mil pesos mensuales, por una supuesta labor de “inteligencia” al servicio de ese organismo.
Los datos están contenidos en una auditoría realizada a la entonces Secretaría de Estados de Interior y Policía (ahora ministerio), en el periodo comprendido entre enero- diciembre de 2008, durante la gestión de Almeyda Rancier en el gobierno del presidente Leonel Fernández Reyna.
Según la auditoría, las autoridades del ministerio pagaban a dos de sus funcionarias y a otra persona particular hasta 300 mil pesos mensuales, por labor de espionaje, popularmente conocida en República Dominicana como “caliesaje”.
Los auditores refieren que la señora Ana Silvia Moronta recibió por ese concepto ocho cheques de RD$ 300 mil, además de devengar un salario extra de 45 mil pesos mensuales como asistente de Almeyda Rancier , y otro sueldo de 70 mil como coordinadora administrativa del ministerio de Interior y Policía.
La investigación también determinó que la señora Yerioska A. Mella retiró un cheque por el monto de RD$ 300 mil pesos, por supuestas labores de inteligencia, recibiendo también otros 93 mil 555 de sueldo y 55 mil como compensación salarial. El informe de la Cámara de Cuentas no especifica el cargo que ocupaba la referida ciudadana en la entidad.
Asimismo, la señora Helen Cesarina Suriel Pujols retiro tres cheques por la suma de 300 mil pesos cada uno, por el mismo concepto que la dos anteriores.
Sin embargo, el informe no la vincula como funcionaria del Ministerio de Interior y Policía, al menos durante el periodo de fiscalización (año 2008).
Los auditores detectaron que los desembolsos fueron registrados como gastos en compras de insumos, pero al no presentar evidencias de documentos que justificaran la emisión de los cheques, los funcionarios de Interior y Policía los justificaron como “gastos de inteligencia”.