A propósito de las declaraciones del Presidente de la República de que “con 10 mil pesos no se vive” puesto que a su entender se trata de un salario no digno que empobrece en lugar de elevar la calidad de vida, residentes en distintos barrios de esta ciudad indicaron estar con el grito al cielo por esta misma situación.
Una realidad a la que además se le suma el alto costo de la canasta familiar y mientras los productos suben, los sueldos se mantienen igual.
María Lantigua madre de cuatro hijos se vio en la necesidad de salir de su casa y dejar a sus hijos bajo el cuidado de terceros “para salir a buscar el sustento diario para mi familia”, sin embargo el dinero que devenga de diez mil pesos mensuales no le alcanzan para bien vivir.
La señora contó que a pesar de trabajar durante una jornada completa, el dinero que recibe mensualmente no le es suficiente para hacer frente a los compromisos del día a día y aquellos que se suman y aunque se justifica diciendo que “quizás gana ese salario por no contar con un título académico, los profesionales también se quejan por los salarios que califican “de miseria” que devengan.
Juana López recibió su título de licenciada en psicología hace cuatro años y también dijo ganar un sueldo de diez mil pesos que no compensa con su trabajo y que como lo dijo el Presidente no le alcanza ni para sobrevivir.
Calificó como muy lamentable la situación que se vive en el país en que el dinero se concentra en unos cuantos mientras que quienes tratan de crecer son aplastados por la clase poderosa que como dijo “acumula toda la riqueza”.
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