Si el mundo supiera que esto se debatió durante dos años; que empezó con advertencias sobre su posible impacto ambiental; que los cuestionamientos prendieron hasta lograr un amplio rechazo social del proyecto; que el Congreso lo aprobó con mayoría casi absoluta (incluyendo los legisladores del partido de gobierno); que Medio Ambiente no hizo nada y la Presidencia durante esos dos años no dijo ni esta boca es mía, ni abrió un diálogo con todos los sectores, ni sus asesores asesoraron; y que ahora...Bueno, el mundo preguntaría: ¿Cómo diablos funciona ese Estado?...(Digo, si es que hay Estado).