Un reporte de la Junta de Revisión de Querellas Civiles de Nueva York (CCRB), divulgado el martes, reveló que, en los últimos años, más oficiales de la Policía en la ciudad han recurrido a la práctica de la llave de estrangulamiento al momento de intervenir con ciudadanos, aun cuando su aplicación está prohibida.
El informe titulado, “La Regla Mutada: la Falta de Cumplimiento ante las Quejas Persistentes sobre Llaves de Estrangulamiento" surge de la evaluación de 1, 128 denuncias presentadas ante el organismo relacionadas con el procedimiento desde el 2001.

De acuerdo con el director de la junta, Richard Emery, lo anterior demuestra que, en los últimos meses, los ciudadanos estuvieron más inclinados a presentar una querella de este tipo que en años anteriores.
La investigación apunta a que la junta falló en evaluar algunas de las alegaciones de estrangulamiento. Destaca, además,que el Departamento de Policía (NYPD) cometió errores al momento de disciplinar a los agentes involucrados.
Para lidiar con el problema, Emery insistió en implementar un programa de reentrenamiento a 36,000 oficiales y una revisión de las guías del uso de la fuerza, incluyendo la prohibición del procedimiento.
Estas sugerencias habían sido anunciadas por el funcionario cuando, en julio pasado, se reportó la muerte del afroamericano Eric Garner, a manos de un uniformado que lo estranguló mientras intentaba arrestarlo en Staten Island.
Este martes, trascendieron detalles de la demanda de $75 millones presentada por la familia del fallecido contra la Ciudad de Nueva York y NYPD.