Santo Domingo
Dentro de nuestro oficio, como en cualquier otro, se entremezclan momentos de gran satisfacción con diferentes obstáculos que nos obligan a sacar de abajo en nuestro afán por generar la noticia, analizarla en su debido contexto y luego registrarla en el interminable archivo de los hechos y su historia.
El balance entre cada cosa es positivo. Cubrir la presentación de cuatro nuevos inmortales del Salón de la Fama del Béisbol de Cooperstown fue una reproducción en pequeña escala de ese reto: Lo vivido en el Waldorf Astoria es parte de nuestro trabajo diario.
Informar y entretener a los oyentes de “En 3 & 2 La Cuenta Máxima”, nuestro espacio radial y en Tv para los televidentes del popular espacio “La Semana Deportiva”, pero no por eso era un día más en el calendario.
El entorno, solemne. La prensa, numerosa, variada, repleta de rostros celebres.
En la inmortalidad de segundo dominicano en Cooperstown Pedro Martínez, trataba de garantizar que toda la República Dominicana escuchara a su nuevo Inmortal.
Que hablara directamente a su tierra y a su gente y dentro de las circunstancias y con algo de suerte y habilidad lo logramos. Nuestro trabajo, nuestra meta seguirá siendo la misma de siempre.
Pero evidentemente nuestra carrera en lo profesional nunca será lo mismo. Estar ahí fue algo más que ejercer nuestro oficio. Fue deleitar nuestra alma quisqueyana.
Fue respirar nuestra pasión y la satisfacción que tiene ésta carrera.