martes, 19 de enero de 2016
¿Cabina masturbatoria en calle de NYC?
NUEVA YORK – Los neoyorquinos ya tienen disponible un nuevo lugar “de ocio” en la ciudad. Se trata de una cabina llamada “GuyFi” -similar a las telefónicas- pero con una cortina, dispuesta para que todo el que quiera masturbarse en la calle sin ser visto.
Aunque, para muchos, la masturbación es un proceso íntimo que se debe disfrutar en solitario, lo cierto es que hay personas que disfrutan más si le añaden un “extra de emoción” y lo practican en espacios públicos. Para estos aficionados a los lugares concurridos, las calles de Nueva York deben ser, sin lugar a dudas, el escenario perfecto de sus fantasías.
La empresa de juguetes sexuales Hot Octopuss ha sabido responder a este mercado y ha traído a NYC el lugar perfecto para proporcionar a los “amantes del riesgo a ser vistos” la posibilidad de aprovechar el ambiente frenético en un rincón más privado y sin exponerse a la comisión de un delito por exhibicionismo o escándalo público.
El proyecto, que fue iniciado en Londres con la instalación de las primeras cabinas “GuyFi”, ha tenido en Nueva York una excelente acogida.
La cabina de “alivio del estrés masculino” está situada en la calle 28 con la 5ª Avenida y está equipada con todo lo que puede necesitar el que busca autosatisfacerse: una silla e Internet de alta velocidad para visitar sus páginas porno favoritas.
Según explica Hot Octopuss, su objetivo es proporcionar un pequeño rincón de alivio para los trabajadores que pasan horas y horas concentrados en sus trabajos. Está demostrado que un pequeño descanso, que cada uno puede aprovechar de la manera que mejor le parezca, ayuda a un mayor rendimiento. Además,
según el medio Time Out, un 39% de los neoyorquinos se masturba en su puesto de trabajo para mitigar el estrés sufrido durante la jornada laboral.
Hot Octopuss proporciona así un lugar para realizar estos tocamientos fuera de la oficina y hace de “GuyFi” un sustituto barato —es gratuito— y más sano que un cigarrillo o un café en el bar cercano a la oficina.
Pero hay un pequeño detalle que ha puesto a indagar a algunos: todo indica que el producto está orientado a los hombres. La empresa tiene tarea pendiente.
eldiariony.com