Al filo de un acantilado, esta villa de 2,000 metros cuadrados no sólo pone a la disposición de sus huéspedes el alquiler de sus ocho suites y del resto de sus instalaciones, sino que invita al disfrute del Océano Atlántico y de un perímetro de costa norte (de 10,000 metros cuadrados), celosamente atesorados por el proyecto Orchid Bay, en República Dominicana.