NUEVA YORK._ El pitcher dominicano de los Yankees de Nueva York Iván Nova (Súper Nova), fue demandado en la corte por su compatriota José Rodríguez, propietario de una casa en el 124 de la avenida Sherman en el acaudalado suburbio de White Plains, alegando que el pelotero y su esposa, “destruyeron la vivienda haciendo rumbosas fiestas”.
Hasta que la demanda fue sometida, se desconocía que Nova no ha comprado una casa en Estados Unidos, especialmente con el millonario contrato que tiene con los Yankees de $3.3 millones de dólares por esta temporada.
El demandante dice que Nova, lanzador derecho y su esposa Jasmine Nova, “destrozaron la casa” con las constantes fiestas que organizaban y que ahora el pitcher no quiere responder por los daños.
“Su apodo puede ser cualquier cosa, menos Súper Nova”, dijo el encolerizado dueño de la casa, añadiendo que durante las fiestas, el jugador y su esposa, arruinaron muebles y electrodomésticos “y dejaron una masiva y desenfrenada infestación de cucarachas”.
Rodríguez dijo que la casa por la que Nova pagaba $4.500 dólares al mes, se convirtió en “inhabitable” desde que el pelotero y su esposa salieron de ella en septiembre de 2015, y los destrozos le costaron más de $24.500 en ingresos perdidos, y otros $50.000 en daños y perjuicios.
El propietario dijo que como "fan de los Yankees de toda la vida", me sentí inicialmente honrado por alquilarle la casa a Nova y su esposa”.
Pero añadió Rodríguez que “sin embargo, en las fiestas ruidosas" de la pareja también se destrozaron luces, ventanas, techos, armarios, ventiladores (abanicos) de techo, puertas, aparatos y grifos (llaves) de cocina rotos, además de "manchas de goma" alrededor de la casa.
Después de que la pareja, se mudó Rodríguez dice que vio "hordas de cucarachas por toda la casa que es de un solo piso y que ahora está "insalubre" e "inhabitable".
Por Miguel Cruz Tejada
