Estas cortas palabras sirvan para dar a todos las gracias infinitas por ese apoyo inmerecido, que tantos de una manera firme me han externado por diferentes vías.
Estos cambios en nuestra Institución son movimientos que se presentan con relativa frecuencia y a lo que ya estamos acostumbrados. Agradezco el gesto de brindarme su apoyo, pero considero no oportuno el hecho de que se hagan manifestaciones, que pudieran ser malinterpretadas por quienes me adversan, como orquestadas por mi.
Reitero, agradezco el apoyo de todos los sectores sensatos de esta región del Cibao, sin embargo, también entiendo que manifestarse de una u otra manera, pudiera ser malinterpretado y tomado como excusas para señalarme ante esas acciones, que respeto, pero que no comparto. Ya sabrá Dios, la dirección que llevará a las Instancias superiores, para que oportunamente se me designe, donde se entienda deba seguir sirviendo a los mejores y más sanos intereses de nuestra Nación.
