lunes, 23 de enero de 2017

Las dominicanas cambian sus hábitos con relación a las joyas, por la delincuencia


Santo Domingo.- La delincuencia ha llevado a muchas personas a hacer cambios en su estilo de vida y, en el caso de algunas mujeres, a modificar su aspecto físico por temor a ser víctimas de algún atraco.

Muchas son las mujeres que han dejado de lucir en su día a día cadenas, anillos, pulseras, relojes y pendientes de metales y piedras preciosas para en su lugar usar prendas de bisutería o “fantasía”, como generalmente se conocen los accesorios de metal, madera, resina, baños de oro, plata y otros de menor costo.

Como parte de estas adaptaciones involuntarias, algunas también han optado por usar carteras sencillas y gafas no costosas para evitar llamar la atención. Y, al momento de desmontarse de sus vehículos, deben ser en extremo cuidadosas al  dejar objetos de cierto valor en el interior de carros y yipetas.



A través de una encuesta en la cuenta de LISTÍN DIARIO en Twitter, 217 personas dijeron haber dejado de usar accesorios de valor para evitar ser víctimas de asaltantes. Frente a estos 89 usuarios de la red que respondieron “No” a la pregunta “¿Ha dejado usted de usar prendas de valor por temor a la delincuencia?”.

Experta explica cambios

La psicóloga Nicole Troncoso, explica en entrevista con listindiario.com que es normal que las personas hagan cambios en su estilo de vida al percibir algún peligro en su alrededor.

Además, Troncoso dice que este pensamiento de inseguridad se hace cada vez más fuerte en la medida en que el individuo se entera de casos de robo o atracos ya sea a conocidos o mediante las noticias.

Troncoso explica que para tener este tipo de temor la persona no necesariamente debe haber sido víctima de un acto delincuencial. Pero dice que, en caso de haber sufrido un robo o atraco, el miedo será aún mayor porque el evento se le graba de una forma más física pudiendo experimentar aceleración en el ritmo cardiaco y en la respiración al estar en una situación que le haga recordar la vivida en el pasado.

Al ser preguntada sobre cuán saludable es este tipo de cambios para la salud mental de las personas, Troncoso aclara que “es bueno ser consciente de cuáles son los peligro reales en el entorno”. Pero dice que “la mejor manera de reconocer si está siendo dañina la reacción es cuando la persona deja de hacer cosas que necesita realizar normalmente. Cuando se empieza a alterar la  rutina diaria es que debemos estar alerta”.

Precauciones

La experta recomienda estar alerta y ser conscientes del lugar donde uno va a estar para así saber cuáles precauciones tomar. Troncoso explica que lo recomendable es que la persona no deje que se altere demasiado su estilo de vida y que establezca pautas de seguridad que le ayuden a reaccionar en caso de que se les presente una situación de peligro.

“Lo recomendable es establecer pautas de seguridad porque cuando uno tiene un plan de acción eso va a evitar que uno desarrolle excesiva ansiedad o sienta más miedo.  Ese plan consiste en tener una red de apoyo, números de emergencia, plan de escape y demás estrategias que ayudaran a la persona a saber cómo actuar en caso de ser víctima de un robo”, indica.

Ventas de joyas siguen con normalidad

Vilma de León, presidenta de la Asociación Dominicana de Joyeros y Artesanos (Asodojo), organización que agrupa a los vendedores de joyería en el país, dijo a listindiario.com que en el sector todavía no se habla de una disminución notable en las ventas producto de la delincuencia.

De León explica que cada prenda tiene una temporada específica para la venta y que, hasta ahora, los joyeros venden con normalidad para la Navidad, el Día de las Madres, las graduaciones universitarias y los matrimonios que generalmente son comunes en los meses de febrero, mayo y diciembre y en el verano.

A su respuesta se sumaron las joyerías Alahas, Sol de Oro, Brandor y Goldblue al ser consultados sobre el tema.

Sin embargo, el encargado de una de estas joyerías, que prefirió no ser identificado, dijo que las ventas no han tenido baja por cuestiones de seguridad debido a que las personas siguen comprando una joya cuando sienten hacerlo y tienen el dinero.

Para este joyero las ventas han experimentado una baja progresiva, pero no por la delincuencia sino por la variedad que ofrece la bisutería. Sobre los atracos entiende que la mayoría de delincuentes se enfocan en robar celulares, cuyo valor es más seguro, en lugar de arriesgarse con una joya que podría salirles falsa.

Sea que este cambio se deba a la variedad de la bisutería o a la delincuencia, lo cierto es que cada vez se hace menos frecuente ver la joyería costosa en los cuellos, dedos y muñecas de las mujeres dominicanas, quienes generalmente son más atacadas por los atracadores al considerarlas victimas más vulnerables.