Para el coronel Rafael Herrera, sindicado como la persona que propuso a Peralta cambiar el cañón de la pistola para desaparecer evidencias, el Ministerio Público solicitaría cinco años de prisión, con la suspensión de tres, según reveló esta mañana a El Nacional una fuente que participa en las negociaciones de la Fiscalía con los implicados en la muerte del exrector de la UASD, a excepción de Peralta.
Producto del acuerdo, en el que los imputados se comprometieron a colaborar con el órgano acusador a cambio de que se les solicite la suspensión de gran parte de la pena a imponer, la Fiscalía pediría 10 años para el transportista Gerardo Félix Mena y su chofer Franklin Venegas Rivas.
Según la fuente, ya los imputados han declarado a la fiscal cómo ocurrieron los hechos que desencadenaron en la muerte de Aquino Febrillet.
En la audiencia de ayer en el Primer Tribunal Colegiado del Distrito Nacional, los abogados de esos imputados no hicieron oposición a ninguno de los pedimentos del Ministerio Público.
La fiscal Yeni Berenice Reynoso acusó a Blas Peralta de atentar contra el sistema de Justicia, con los múltiples incidentes planteados para darle larga al caso.
La magistrada advirtió al sindicalista que él no está por encima de la ley, para estar obstruyendo el desarrollo del proceso judicial que se le sigue con estrategias incidentales.
Refirió que Blas Peralta ha hecho elección de abogados en tres ocasiones y solicitó al tribunal que no permita que Peralta continúe cambiando de abogados “cada vez que le venga en gana”, con la intención de retrasar el proceso.
El juicio de fondo a Peralta y a los otros tres imputados continúa el viernes en el Primer Tribunal Colegiado del Distrito Nacional.