Es decir, si la Comisión de Boxeo, que encabeza el colega y amigo Franklyn Núñez, no tiene control de reglamentos y sus ejecutorias eso se convierte en una bomba de tiempo para que ocurran cosas malas. De hecho, no es fácil asistir a una cartelera de boxeo profesional en esta capital, toda vez que su montaje es algo que da pena. No tiene el boxeo RD tampoco empresarios auténticos, pese al esfuerzo de algunos de ellos como Cesar Mercedes (alias Manguita). Pero es responsabilidad del Ministerio de Deportes supervisar esas comisiones, y aprovechar casos lamentables y trágicos como el sucedido ahora para hacer una evaluación a fondo de dicho organismo, y de otros que se manejan bajo esa dependencia.
Por eso, digo que es incorrecto del Ministro Danilo Díaz designar una comisión investigadora presidida por el propio presidente de la Comisión pues eso no tiene pies ni cabeza. La Comisión que evalúe eso debe estar formada por funcionarios y deportistas neutros y ajenos al boxeo profesional, que no tengan conflictos de intereses con lo sucedido. No por quien está cuestionado sobre la incorrecta aplicación y cuidado de los reglamentos.
Asi no debe ser, amigo Danilo. Es indebido y ojalá se anime a corregir ese entuerto.
Aclaro, además, que no conservo ninguna esperanza de que alguna comisión arroje un resultado que señale culpables pues este país está demasiado mal en el enfrentamiento de cosas defectuosas. Pero, al menos uno pide que se guarden las apariencias y que las cosas se hagan bien.
