domingo, 3 de septiembre de 2017
Tony López comparte su tiempo entre la comunicación y la cocina
Por Félix Jacinto Bretón
Tony López es un reconocido comunicador, nativo de Moca pero que también hizo vida en Santiago durante largo tiempo, para luego trasladarse a los Estados Unidos, donde comparte su tiempo entre la cocina y la comunicación.
En su ciudad natal, Moca, López participo y hasta dirigió varios espacios radiales, tanto noticiosos y musicales como de comentarios y deportivos. Luego se trasladó a Santiago donde continuo ejerciendo la comunicación y llego a ser hasta relacionista de Transporte Espinal y de otras instituciones.
Se trata de un hombre sin pose, sencillo y humilde que no esconde que en Nueva York, donde se ha establecido, específicamente en Queens, se dedica además de ejercer la comunicación, “al arte culinario”, es decir a “chef de cocina”.
“Hay que tratar de abrirse campo y el trabajo no me avergüenza siempre y cuando sea honrado”, dice Lopez, quien ya tiene 11 años residiendo en la Gran Urbe, a la que llego en mayo del 2004.
El viaje de él, aclara, no fue parte “del sueño americano” ya que fue algo fortuito por asuntos de salud y de familia. “Y aquí estoy con mi esposa y mis hijos sin fecha de regreso por ahora”, agrega.
Entre la cocina y la comunicación
Desde horas tempranas del día y hasta las 2:00 de la tarde se dedica “a la cocina” en una bodega de Queens, y en la noche dedica dos y tres horas a escribir ya que forma parte de la Federación Internacional de Periodistas Digitales (FIPD) que en todo EEUU son más de 7 mil 500 y en el mundo cerca de 20 mil.
Tony también colabora con algunos medios de Republica Dominicana y es un seguidor de las redes sociales. Regularmente se le encuentra en Facebook haciendo comentarios diversos, en especial sobre su país.
Estados Unidos: ventana abierta
El comunicador quisqueyano define a los Estados Unidos como una venta a abierta de posibilidades, de libertades y de apertura donde, el que trabaja seriamente, puede alcanzar “quizás no el sueño americano, pero si la paz y la estabilidad para ti y los tuyos”.
También puede ayudar, en la medida de las posibilidades, a su gente y a los amigos más cercanos que precisan de uno. “Eso, si trabaja honradamente, si tomaste otro camino, puede fracasar en días o semanas”, razona.
Dice que le agradece mucho a los EEUU y que lo bueno de Dominicana es que, según López, mientras tú más lejos estas, más la añora, más la extraña. “De ver la bandera y escuchar el himno, tú te atragantas”, confiesa.
“Es que la RD es una patria de un gentilicio que tu (el periodista que lo entrevistaba) muy bien conoce, alegre, positivo, solidario y siempre de lucha”.
Menos restricciones
Sobre el ejercicio de la comunicación en los EEUU, Tony afirma que en este país hay menos restricciones que en Dominicana aunque existe una mayor regulación para los que ejercen el oficio.
En RD, recuerda, cualquiera se engancha a periodista o a comunicador con tan solo ponerle un rotulo de prensa al vehículo en que se desplaza. “Aquí no, para uno ponerle un letrero de prensa a un vehículo, primero hay que acudir a la policía con los documentos que te avalen para y ella emite el permiso para que lo porte”.
Tony no esta tan de lleno en la comunicación en Norteamerica porque no ha aprendido a pronunciar muy fluido el inglés, lo que es una condición “sine qua non” para poder salir adelante en este campo. Sabe defenderse, pero no lo suficiente como para el ejercicio pleno. Admite que en eso se ha descuidado un poco.
Su paso por los medios en RD
“Pero en cuanto al desarrollo del trabajo, siempre he trabajado y ahora comparto la comunicación con la cocina”, destaca López quien inicio a los 18 como locutor noticioso en Moca.
Se graduó luego en la Escuela Nacional de Locución y Periodismo que dirigía el fenecido Otto Rivera, ubicada en el Conde esquina Espaillat, de Santo Domingo, donde todavía funciona.
Trabajo en Radio Ideal y Radio Horizontes en Moca, así como en Radio Glaray, esta propiedad de Gabino Núñez Rosa. En Santiago se integró al programa “Entre amigos” de Alberto José y Ney Zapata.
Estuvo junto a Guillermo José Saleta y José Gutiérrez cuando tenían su espacio por Ondas del Yaque. Se desempeñó como reportero. Lo mismo hizo para la Z-101. En Radio Amistad participo en un programa deportivo.
Su currículo incluye el trabajo de 10 años en el Palacio de los Deportes, hoy Arena del Cibao, tanto en la amplificación interna como en la lectura de comerciales durante la transmisión de los partidos de baloncesto. Trabajo en Radio Azul en horas de la tarde.
Fue colaborador del Listín Diario y La Información. Como relacionista público permaneció 9 años en el Instituto Evangélico, así como en la Iglesia Metodista Libre, además de Transporte Espinal, donde permaneció por espacio de 12 años hasta que emigro a los Estados Unidos. Agradece el apoyo que encontró de parte de su propietario Don Freddy Espinal.
