De acuerdo con un reporte de Liverpool Echo, del pasado 29 de octubre, Tom Keating se convirtió en residente de la residencia de Moss View en 2016 porque necesitaba más atención y apoyo.
Un año después, su madre Ada decidió mudarse a la misma casa para ayudar a cuidarlo. “Le digo buenas noches a Tom en su habitación todas las noches y voy a ir a darle los buenos días”, expresa Ada al hablar del cuidado que brinda a Tom, quien vivió toda su vida junto a ella y antes de su retiro fue pintor y decorador en servicios de construcción. Nunca se casó.
Ada trabajó como enfermera auxiliar y tuvo cuatro hijos con su difunto esposo Harry: Tom, Barbara, Margi y Janet, que falleció a los 13 años.
Los familiares de Ada y Tom son visitantes regulares del hogar de cuidado y dicen que están felices de que puedan estar juntos de nuevo. “Para nosotros es tranquilizador que ambos estén siendo atendidos las 24 horas del día, los 7 días de la semana”, dijo la nieta de Ada, Debi Higham.
Philip Daniels, administrador del hogar de cuidado, dijo que “es muy conmovedor ver la estrecha relación que comparten Tom y Ada, y estamos muy contentos de haber podido satisfacer las necesidades de ambos”.
Apuntó que es “muy raro ver a madres y sus hijos juntos en el mismo hogar y ciertamente queremos hacer que su tiempo juntos sea lo más especial posible”.
