jueves, 11 de octubre de 2018

Dominicanas residentes en La Florida narran lo que hicieron para librarse de la furia del huracán Michael




Santo Domingo.- En cuestión de horas Panamá City, en La Florida Estados Unidos, pasó ser de un fabuloso espacio para el turismo a una pesadilla para sus residentes.

Así lo describió la joven Glendy, quien manifestó que no estaban preparados para un huracán de la categoría de Michael, que alcanzó vientos de 250 kilómetros por hora cuando tocó tierra.

Dijo que la mayoría de los habitantes de su comunidad, subestimaron el huracán, pero ella decidió irse a Diloxi Mississipi, que queda a tres horas y media, para salvaguardar su vida y la de los suyos.

“Realmente todos estamos asustados. No sabemos qué va a pasar con nuestra casa. No Sabemos en qué estado vamos a encontrar nuestro querido pueblo, que es una ciudad con una playa hermosa”, comentó.

Dijo que se sienten impotentes y tristes al ver por las redes sociales cómo ha quedado su ciudad.

“Yo acabo de comprar mi casa y no sé en qué estado la voy a encontrar, pero lo importante es que mi familia y yo estamos bien. Esperamos que no haya tanto desastres”, manifestó.



También Cynthia Santana narró que su experiencia fue terrible y que es la primera vez que, viviendo en Florida, tienen que salir despavoridos de su casa para liberarse de la furia de un huracán.

“A las cuatro de la mañana nos mandaron mensajes, en el que nos advertían que  teníamos una hora para salir de nuestras casas y que después de eso iban a cerrarlos puentes. Yo de inmediato llamé a mi hijo y tomamos la carretera sin saber a qué destino íbamos”, agregó.

Explicó que su hijo fue quien se actualizó buscando rutas y posibles localidades en las que no fueran afectados por el huracán Michael.

“Realmente en el camino fue que pensamos el destino que íbamos a tomar y llegamos a Jacksonville, que está a cuatro horas de la ciudad, porque todos los alrededores estaban en peligro también y nos alojamos en un hotel por dos días, pero no sabemos si tenemos que quedarnos más tiempo. Mi hija y mi madre tomaron otros destinos”, narró.

Dijo que la ha invadido la incertidumbre, porque no saben cómo está la casa, porque pueden aparecer ladrones y aprovecharse de la situación.

“Uno siente micha pena y piensa si habrá valido la pena haber dejado a su familia detrás del sueño americano, que ahora mismo es una pesadilla, verdad”, comentó.

El huracán Michael tocó tierra ayer como el más potente que azota la costa oeste de Florida en más de un siglo, con vientos máximos sostenidos de 250 kilómetros por hora, los cuales pueden causar una devastación significativa.

Describió la situación que vive tras el paso de  huracán Michael como deprimente, porque aún no ha recibido información acabada de lo que ha ocurrido en su comunidad.

@listin