martes, 20 de noviembre de 2018

El 25% de las personas prefiere salir desnuda a la calle antes que quedarse sin internet


Internet. Esta es la clave de nuestra vida diaria. Trabajar, comer o dormir son acciones que han quedado relegadas a un segundo plano en el día a día de las personas. El mundo digital se ha enraizado con tal fuerza en nuestra vida diaria que no tener Red puede provocar un gran desasosiego. De hecho, según un estudio de Kaspersky Lab, el 23% de los encuestados preferiría que les vieran desnudos en público antes que no poder conectar sus dispositivos.

Si lo pensamos detenidamente, la verdad es que cualquier acción mínima de nuestra vida tiene que ver con el hecho de estar conectados: hacer fotos, utilizar el GPS, mantenernos en contacto con nuestros seres queridos... Por ello, el 69% de las personas siempre llevan consigo su «smartphone» cuando salen de la casa (aunque sea por un período corto de tiempo) y 1 de cada 10 lo lleva consigo en todo momento, incluso cuando está en el baño.

El estudio de Kaspersky Lab, elaborado en base a 11.250 personas de entre 18 y 60 años, de 15 países, aborda cuestiones como sobre la importancia de permanecer conectado, los problemas de conexión a los que se han enfrentado y las consecuencias de no poder conectarse.

Así que pasar un día sin internet es para la mayoría una misión imposible. Por eso, no es de extrañar que para 1 de cada 5 de las personas (22%) entrevistadas, tener conexión es tan importante como tener acceso a comida, agua y alojamiento.

El «smartphone» se ha convertido en un apéndice de nuestra mano. La dependencia de los dispositivos y la conectividad es tan alta que perderlo sería un auténtico drama. El 90% de los encuestados reconoció que se sentirían estresados si perdieran o les robaran su dispositivo, un porcentaje más alto que en los casos de perder un tren/avión (88%), verse involucrado en un accidente automovilístico menor (88%) o caer enfermo (80%).




Falta de precaución

El problema es que la dependencia llega hasta tal punto que los usuarios están dispuestos a correr peligro: un 26% ha cruzado la calle mientras miraba la pantalla de su teléfono y el 21% lo hacía caminando por una zona desconocida/peligrosa.

Además, 1 de cada 5 afirmó en el estudio sentirse desnudo sin su dispositivo. Esto es algo que Kaspersky Lab ha investigado con más detalle en un reciente experimento, cuando un voluntario indefenso y desnudo intentó localizar su ropa en una ciudad desconocida, sin teléfono y sin todas las ventajas que la conectividad ofrece. Como nuestro estudio y este experimento social ha demostrado, no tener un dispositivo conectado es como ir desnudo.

Sin embargo, a pesar de la importancia que le damos a la conectividad, los usuarios no se preocupan por tomar ciertas precauciones. Por ejemplo, solo el 34% controla los niveles de la batería y un 22% verifica regularmente el estado de su dispositivo. Así, no es de extrañar que 9 de cada 10 encuestados hayan tenido problemas inesperados, como quedarse sin batería (76%), errores técnicos (40%) o incluso se dejó el dispositivo en alguna parte (37%). Como resultado, las personas están corriendo riesgos en su vida profesional y personal.

«Con la conectividad afectando a todos los aspectos de nuestras vidas, la seguridad no puede pasarse por alto, y debe estar allí, sin importar lo que estemos haciendo y donde sea que nos encontremos. Los usuarios deben asegurarse de que su conexión sea siempre segura», afirma Dmitry Aleshin, vicepresidente de marketing de producto de Kaspersky Lab.

Publicado originalmente en abc.es