El Diario de Nueva York asegura que tras visitarlo en la prisión, Fernich y la abogada Mariel Colón notaron a "El Chapo" muy cambiado "estaba triste, completamente diferente en su comportamiento, hasta de sus ojos", señaló el defensor.
"Incluso su cabello, le afeitaron la cabeza. No importa si ha sido condenado por los crímenes más atroces o crímenes horribles, no creo que nadie merezca ser tratado de esa manera", aseguró Fernich.
De acuerdo con su defensa legal, Guzmán Loera "no se está adaptando a la vida en la prisión Supermax", a pesar de que tiene permitido tener tiempo para hacer ejercicio al aire libre en una zona restringida, sin embargo las visitas son cada vez más estrictas.
Los abogados de "El Chapo", quien actualmente tiene 62 años de edad, trabajan en un recurso de apelación, a petición del mismo capo.
"El Chapo" pasará lo que le resta de vida en la prisión más segura de Estados Unidos.
La mañana del 17 de julio, el juez Brian Cogan condenó a cadena perpetua más 30 años, a Joaquín Archivaldo Guzmán Loera, sentencia que ya cumple en la temida prisión de ADX Florence, considerada la cárcel más segura de Estados Unidos, ya que está diseñada a prueba de fugas.
Fue en la sala 8D de la de la Corte Federal de Brooklyn donde el sinaloense escuchó las palabras más terribles de su vida: ser condenado a vivir hasta el último de sus días en una prisión. Lejos de su familia y la sierra de Sinaloa, México, donde construyó un imperio criminal.
Antes de escuchar su sentencia, Joaquín "El Chapo" Guzmán habló por primera vez ante la corte.
El criminal mexicano no mostró arrepentimiento al momento de hablar ante el juez.
"El juez me ha negado un juicio justo cuando todo el mundo lo estaba viendo", el cual dijo, "estuvo estado manchado por la mala conducta del jurado". Además, volvió a quejarse de las condiciones en las que está recluido al ser víctima de "un trato cruel e inhumano".
Guzmán calificó como "corrupto" al sistema de justicia estadounidense.
Quien causó gran expectativa a su llegada fue Emma Coronel, la joven esposa de "El Chapo". A su arribo lució cabizbaja, vestida con una blusa blanca, chaleco negro, cabello suelto y lentes oscuros.
Ese miércoles fue el último día que pudieron verse, ya que el estricto reglamento de la prisión ADX Florence no permite visitas ni llamadas por teléfono.
La mamá de las gemelas de "El Chapo" simplemente se despidió del acusado con un ademán de adiós. No hubo lágrimas ni lamentos.
A Emma se le veía distraída, mirando el suelo de la corte mientras se desarrollaba la audiencia. Guzmán Loera la buscó con la mirada, pero pocas veces la encontró.
Quienes también estuvieron presentes fueron Rosa Isela Guzmán, presunta hija de "El Chapo" quien llegó junto a una prima, identificada como Dania.
La gran ausente fue la madre del Chapo, María Consuelo Loera Pérez. No pudo viajar para ver por última vez a su hijo, debido a que las autoridades estadounidenses le negaron la visa humanitaria, argumentando que "nadie que tenga vínculos directos o indirectos con el narcotráfico, podía ser candidato a una visa".
Se sabe que la señora Loera Pérez tiene problemas físicos y camina con dificultad.
El gobierno de EEUU acusó al Chapo de traficar o intentar traficar 1.213 toneladas de drogas a Estados Unidos a lo largo de un cuarto de siglo, así como 1,44 toneladas de base de cocaína, 222 kg de heroína, casi 50 toneladas de marihuana y "cantidades" de metanfetaminas.
Durante el juicio, la acusación presentó pruebas de que ordenó la muerte o torturó y mató él mismo a por lo menos 26 personas o grupos de personas, incluidos supuestos informantes, narcos rivales, policías, socios y hasta familiares.
Luego de un rocambolesco juicio de tres meses, lleno de momentos escabrosos y surrealistas, el 12 de febrero un jurado le declaró culpable de 10 delitos de narcotráfico, lavado de dinero y posesión de armas de fuego. La sentencia llegó el 17 de julio: cadena perpetua más 30 años, los cuales ya cumple en la temida prisión de ADX Florence.
@infobae