Estrella, de 29 años, agradeció a Kerlyn Espinal, encargada de la División de Inmigración de la oficina del senador, las gestiones ante el consulado estadounidense en la República Dominicana para que se le permitiera a Lourdes de Estrella le acompañara en sus últimos días.
Él había clamado ayuda para que el amor de su vida, su esposa, viniera atenderlo, ya que llevaba tres meses interno por una enfermedad que ha destruido su hígado.
“Me siento emocionado de poder ver a mi esposa aquí conmigo y yo en mi casa”, dijo Estrella desde su hogar en Paterson, donde se encuentra tras haber sido dado de alta.
“No hay palabras para expresar lo que siento, me siento feliz, contenta y agradecida con Dios por darme la oportunidad de estar aquí junto a mi esposo”, dijo por su parte Lourdes.
@elnacional