Consideró que el problema no es la falta de una procuraduría especializada para perseguir los delitos electorales, porque es muy bonito crearla, sino que ejecute el mandato legal. “Cuando haya una procuraduría para eso, queremos ver la primera cabeza que ruede”, enfatizó, tras indicar que si no se somete a los que violen la ley electoral que penaliza los delitos electorales, se tratará de un “parapeto”.
Enfatizó que se tiene que ver quiénes son los que están violando la ley y que sean castigados.
“El problema no es la ley, no debería haber compra de votos, ni nadie debería comprarlos”, dijo.
Sostuvo que se habla mucho y no se hace que la ley se cumpla, a la vez que consideró que no es cuestión de tener mandarrias, sino de tener un sistema que sea transparente y que se cumpla procesando a la justicia a los violadores de la ley. “Si hay una ley que sanciona los delitos electorales tiene que ser cumplida”, insistió.
Entiende que se debe elegir al Presidente que el pueblo dominicano quiere, no el que más puje, porque en eso consiste la verdadera democracia. Enfatizó que se debe velar porque las elecciones, tanto las municipales como las presidenciales y legislativas, sean verdaderamente un proceso transparente.
El obispo fue entrevistado luego de oficiar una misa con motivo del octavo aniversario del Tribunal Constitucional, en la que instó a los jueces de esa alta corte a juzgar para que se cumpla con el orden constitucional.
Causas de la violencia
Por otro lado, atribuyó la violencia que impera en el país a fallas en el proceso educativo, y planteó que se requiere un sistema de educación socioafectiva en las clases.
Dijo que desarrollarán un plan piloto para educar a estudiantes con un programa socioafectivo durante tres años, para que los jóvenes y niños tengan las herramientas para manejar temas como el acoso físico y sicológicos (bullyng) y otra presiones grupales.
REFLEXIÓN
Estamos creado un país violento
Agresividad. El obispo dijo que estamos creando un país violento, y un país violento en el que no se le pone límite puede llegar a cualquier cosa, eso son los números que hablan de feminicidios, de asesinatos. La violencia siempre ha estado presente, hay convivencia agresiva.
@listin