miércoles, 1 de abril de 2020

Este 1 de abril será imposible pagar la renta para neoyorquinos afectados por coronavirus


Por: Ana B. Nieto

La pandemia del Covid-19 afecta la salud de cientos de miles de personas y a la ansiedad del resto. La salud física primero y la económica después es la gran preocupación sobre todo cuando toca abrir la chequera para pagar.

El sufrimiento económico va a adquirir una dimensión muy real el 1 de abril. Es la fecha en la que normalmente ha de pagarse la renta, algo que hacen dos de cada tres residentes de la ciudad normalmente.

Ahora las estrecheces de meses anteriores en una ciudad tan cara como Nueva York son mucho mayores y la pandemia del Covid-19 complica a muchos ciudadanos el pago de esta factura crucial para las familias, los caseros y las arcas públicas vía caída de ingresos por impuestos.

El martes asociaciones y organizaciones comunitarias solicitaban en todo el país la congelación de los pagos de los alquileres. Quienes no firmen el cheque de pago, no lo hacen por elección sino por necesidad porque según la encuesta de seguimiento hecha la semana pasada por CUNY Graduate School of Public Health & Health Policy (CUNY SPH), el 36% de los neoyorquinos reportan que alguien en su hogar ha perdido el trabajo debido a la pausa en la actividad por el virus.

En el caso de los latinos, el porcentaje sube al 46% y les mantiene como la comunidad más perjudicada por la pérdida de empleos.

El informe refleja que el 44% de los neoyorquinos están preocupados por su situación con respecto a la vivienda y temen no poder pagar, el 27% no puede hacer frente al alquiler y el 17% tiene problemas con la cuota de la  hipoteca. El 59% teme la evicción.

The New York Times apuntaba que fuentes de la industria inmobiliaria temen que un 40% de los inquilinos, sino más, no pagarán el mes de abril.



En Nueva York hay una moratoria de 90 días en el pago de la renta pero eso no quiere decir que no haya que pagarse. Eso si, se anima a inquilinos y caseros a desarrollar un plan de pago deferido para poder hacerlo una vez que pase la crisis médica y se pueda recomponer la economía.

En caso de que no se haga, puede que tras este plazo haya una montaña de desahucios por tramitar.

Los cheques que mandará el Tesoro con $1,200 por adulto contribuyente y $500 por menor no llegarán a la importante comunidad inmigrante que paga taxes con ITIN y el resto no lo verá hasta bien entrado el mes en el mejor de los casos.

Los presidentes de los condados de Manhattan y Brooklyn junto con algunos concejales han escrito una carta al gobernador Andrew Cuomo con el plan de permitir que el depósito de seguridad de un mes en los alquileres pueda ser considerado como renta siempre y cuando este se reponga en 30 días o se haga un seguro de inquilinos que cubra daños.

Las llamadas a la congelación de las rentas se han multiplicado y el senador Michael Gianaris ha hecho formalmente una propuesta para que inquilinos residenciales y comerciales que no tengan ingresos puedan tener el alquiler suspendido durante 90 días.

Todas estas medidas perjudican a muchos caseros que están lejos de ser empresas con un fuerte flujo de caja. Los pequeños caseros, sobre todo cuando tienen hipotecas que pagar, se van a ver entre la espada y la pared. Cuomo ha puesto en marcha una moratoria de pagos de cuotas para dueños de casas en las que haya una o dos familias. El plan es que las paguen después.

Los caseros de casas multifamiliares, un brownstone de más de dos apartamentos, no pueden considerar esta ayuda aunque los bancos están abiertos, lentamente, a algún tipo de negociación.

La última pieza del dominó inmobiliario se cae a la puerta de los propios gobernantes porque la pausa de esta actividad afecta a la recaudación de impuestos y eso es clave para la marcha de los presupuestos locales.