Santo Domingo, RD
La secretaria ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), Alicia Bárcena, consideró que el principal criterio que deben tomar en cuenta los países para reactivar sus economías es la salud, por lo que para dar este paso, naciones como República Dominicana deben esperar que la curva de contagios por coronavirus se “aplane”.
Bárcena dijo que naciones como China han reabierto sus actividades económicas de esta manera, donde la pandemia por el COVID-19 ya ha dejado de expandirse. Sin embargo, reconoció que las naciones van a convivir con este virus hasta que no se encuentre una vacuna.
Al ofrecer una rueda de prensa virtual, Bárcena destacó que las medidas de distanciamiento social deben mantener en las regiones donde hay hacinamiento y primero, antes de reabrir, se deben establecer protocolos de retorno.
“Hay que ampliar lo más posible las pruebas. En la medida que tengamos más claridad de donde tengamos los focos de contagio será más fácil orientar a la población, dijo la secretaria ejecutiva del organismo internacional, quien agregó que por eso la CEPAL está recomendado a los países de la región que los gobiernos garanticen transferencias monetarias temporales inmediatas para satisfacer necesidades básicas y sostener el consumo de los hogares, lo que será crucial para lograr una reactivación sólida y relativamente rápida.
Esta ayuda sería denominada “Ingreso Básico de Emergencia (IBE)”, que debería entregarse por los próximos seis meses y consistiría en una ayuda de los gobiernos a las personas en condiciones de pobreza de US$143 dólares, para que “la gente tenga la oportunidad de moverse en sectores productivos tomando algunos riesgos y puedan subsistir”.
La CEPAL informó que el IBE podría beneficiar a unas 215 millones de personas vulnerables o el 34.7% de la población regional. Esto implicaría un gasto adicional del 2.1% del PIB para abarcar a todos los que se encuentren en situación de pobreza en 2020.
Con el IBE, de acuerdo con la representante de la CEPAL, se puede garantizar un ingreso en los países en los que se reabra la economía y luego haya un rebrote por lo que otra vez haya que empezar a suspender actividades económicas.
Los menos afectados
Los sectores que menos sentirán los embates de la crisis, según las declaraciones de Bárcena son: Agropecuaria, Minería, Construcción, empresas de Servicios, Telecomunicaciones, Actividades Financieras y Servicios Públicos.
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