“Invito a los servidores públicos a abstenerse de colocar la fotografía del Presidente en sus despachos. Coloquen a su familia y a sus hijos”, recomendó en las redes sociales.
El objetivo es acabar con el culto a la personalidad de quienes se “creen caudillos”.
Abinader sostuvo que no está en el Estado para que lo aplaudan, sino para servir a la gente.
Por años se ha "venerado" a la figura del Presidente en las oficinas gubernamentales.
cdn