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| El dueño del lugar no encuentra explicación para semejante acción | |
Por ADN America Staff
Un cliente de una tienda Subway en Atlanta mató a tiros a una trabajadora e hirió a otra después de que la mujer pusiera demasiada mayonesa en su sándwich. Pareciera un chiste, aunque, lamentablemente, no lo es.
El tiroteo tuvo lugar en una gasolinera Circle K en Northside Drive, alrededor de las 6 y media de la tarde de este domingo. Las dos víctimas, ambas mujeres, fueron encontradas después de que la policía llegara al lugar, al recibir el aviso
Tras el incidente, una de las mujeres fue trasladada inmediatamente al hospital para ser intervenida quirúrgicamente, aunque su condición médica sigue siendo desconocida. Se cree que el sospechoso está prófugo desde la mañana de este lunes.
Hasta el momento, tampoco se han revelado las identidades, ni del sospechoso ni de la víctima fatal luego del tiroteo. Tampoco está claro si el tirador fue un hombre o una mujer, aunque todo parece indicar que fue un hombre.
En tanto la Unidad de Asuntos Públicos del Departamento de Policía de Atlanta aún no ha emitido una declaración, pero respondió a una consulta de la prensa, con un correo electrónico genérico que decía “un resumen del incidente se publicará en nuestro sitio web momentáneamente”.
Por su parte, el dueño de la tienda Subway, Willie Glenn, insinuó que el sospechoso era un hombre, y compartió detalles con otros puntos de venta de la zona: “Me rompe el corazón saber que alguien tiene la audacia de apuntar con un arma y dispararle a alguien por tan solo demasiada mayonesa en un sándwich”.
También el propietario del lugar dijo que el hijo de la empleada que había sido baleada estaba dentro de la tienda en el momento del tiroteo. “Una de las jóvenes que fue asesinada hoy, su hijo estaba en la tienda. Ella tenía un hijo pequeño que tuvo que presenciar todo esto”, le dijo a la cadena Fox 5 Atlanta que cubrió la noticia.
Las dos empleadas de la tienda habían estado en el trabajo apenas un mes, agregó, y las describió como “empleadas modelo”.
“No sé en qué se está convirtiendo el mundo, especialmente con nuestra juventud... Parecen ser tan impulsivos”, comentó el dueño del establecimiento.
