Tras una discusión con el personal de la aerolínea, la pareja no se salió con la suya y, para el asombro de todos, dejó al bebé en el cochecito y se dirigió hacia el control de pasaportes sin él.
La pareja había llegado tarde a la terminal para su vuelo de Ryanair de Tel Aviv a Bruselas este martes, después de que terminó la registración, y no queda claro si ya no era posible comprar un billete más o si directamente se negó a pagar el pasaje a su hijo.
La Autoridad Aeroportuaria de Israel aclaró a la cadena local Channel 12 que la pareja fue interceptada por el personal del aeropuerto de camino a la puerta de embarque y fue devuelta a los mostradores para hacerse cargo de su retoño.
Un portavoz de Ryanair comentó a The Jewish Chronicle que el empleado de la aerolínea que estaba en el mostrador de facturación alertó al equipo de seguridad del aeropuerto y luego el asunto quedó en manos de la Policía.
Según reporta Israel Hayom, la familia acabó perdiendo el vuelo.