El procurador general de la República, Francisco Domínguez Brito, dispuso la eliminación de los aires acondicionados y otros privilegios que existen en las cárceles del país que aún operan dentro del modelo tradicional de prisiones.
Mediante una comunicación enviada al director de Prisiones, mayor general Tomás Holguín la Paz, el magistrado Domínguez Brito impartió instrucciones para que ningún recluso disfrute de esas comodidades, así como del uso de parábolas, laptops, entre otros.
El procurador indica, además, que los que gozan de esos privilegios son los reclusos que precisamente cumplen condenas por graves delitos, los cuales les han permitido ser poseedores de grandes fortunas de dinero, con las que acostumbran a comprar, no sólo impunidad, sino también ciertos beneficios que el sistema no puede seguir permitiendo.
“Los narcotraficantes por ejemplo, tienen muchos aires acondicionados y eso para nosotros es intolerable", afirmó.