El horno del PLD arde por dentro y suelta humitos. Primero fue Margarita. Luego Temo. Después Felucho. Continuó Franklin. Y siguió Reinaldo. Y ahora Francisco Javier. Todos con Leonel como telón de fondo. Y en el centro de la diana de dardos y cañonazos (incluyendo extensos libelos anónimos) están Montalvo, Peralta, Carlos Pared y toda presencia, saludable por cierto, de gente de un país que es ancho y ajeno, más que la corporación PLD... Se repite una fatídica historia: a escasos ocho meses, no dejan gobernar a Danilo Medina, aunque faltan 39 meses para las elecciones.
Por Ramón Colombo