CBC News informó que al menos 23 mujeres habrían muerto por el consumo de pastillas anticonceptivas Yaz y Yasmin, las cuales son comercializadas en varios países de Latinoamérica.
La cadena de TV investigó estas píldoras fabricadas por el laboratorio alemán Bayer y mediante documentos del Ministerio de Salud canadiense declaró que estas coagularían la sangre lo que habría provocado la muerte de muchas mujeres en varios países.
Uno de los casos es el de Miranda Scott de 18 años. Hace tres años la joven se encontraba en el gimnasio Okanagan de la Universidad de Columbia Británica, mientras "se ejercitaba en una máquina elíptica se desplomó y murió", comentó a CBC su madre, Chip McClaughly quien está ligada al grupo que busca demandar al gigante farmacéutico.
Según comenta la madre de Miranda, su hija era una joven atlética y sana, pero decidió investigar qué fue lo que le ocurrió a su hija. "Tan pronto como me enteré de que ella había estado tomando Yasmin, pensé, 'Voy a buscar eso'". La mujer asegura que fueron las píldoras las que mataron a Scott.
La autopsia de la joven fue lapidaria, murió por "coagulación intravascular diseminada", esto significa que los coágulos de sangre se forman dentro de los vasos sanguíneos de todo el cuerpo. Lamentablemente, esta historia se repite en una gran serie de chicas.
Es por esto que el abogadoMateo Baer está a la cabeza de un grupo de mujeres de Ontario organizando una demanda colectiva contra Bayer.
El representante legal comentó a CBC que el "Informe de la autopsia de Scott aseguró que había tenido una embolia pulmonar. Estamos alegando que con Yasmin hay un peor efecto secundario que con otros anticonceptivos orales".