martes, 24 de febrero de 2015

Santiago y La Altagracia, con más flujos de capitales desde resto de RD


SANTO DOMINGO. Durante 2014, las captaciones o depósitos de los bancos múltiples promediaron en un monto equivalente en moneda nacional de RD$630,238.2 millones, mientras que el promedio de la cartera de préstamos fue de RD$630,403 millones.

 Como resultado de esas operaciones de intermediación financiera, consistente en captar depósitos para luego prestarlo, los bancos quedaron con un balance compuesto por parte de las captaciones no prestadas ascendente a un promedio anual de RD$212,053.4 millones.

 Una parte de las captaciones bancarias son depositadas como encaje legal en el Banco Central, o se mantienen como fondo líquido en las instituciones financieras. Por esta razón los montos depositados por lo general son mayores a los otorgados como créditos, en una economía. Pero visto en detalle, no en todos los casos esa regla parece cumplirse, aunque por otras razones.

 Durante 2014, Santiago de Los Caballeros y La Altagracia, dos provincias del centro y este del país, recibieron de los bancos múltiples, según los montos promedios anuales, más dinero en préstamos que los que sus respectivas empresas y habitante depositaron en los bancos múltiples. Eso significó, en promedio, un balance positivo de ingreso de capitales, o “endeudamiento neto”, por RD$21,264.9 millones. 

 Ese balance para Santiago fue en promedio de RD$14,053.1 millones como resultado de depósitos por RD$25,512.8 millones, y préstamos por RD$39,565.9 millones. 

 Mientras que en el caso de La Altagracia, el promedio anual del monto total de los préstamos fue de RD$27,232.6 millones, mientras que el de los depósitos fue de RD$20,020.7 millones, lo que resulta en un balance positivo de RD$7,211.8 millones. 

 Las estadísticas trimestrales publicadas por el Banco Central correspondiente a las captaciones y préstamos de los bancos comerciales revelan que en algunas pocas provincias los préstamos superan los depósitos, contrario a los casos de la mayoría de las provincias restantes, donde es lo contrario. Esto refleja una movilidad de capitales interprovincial, en el país. 

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